Estoy herida (primer paso para sanar)

¿Como se si estoy herida?

Te comparto una lista de posibles reacciones ante una herida:
  • Te cambia el humor y te enojas con facilidad
  • Sientes culpa por cosas insignificantes
  • No estamos seguras de nada
  • Amamos y odiamos al mismo tiempo
  • Queremos estar a solas y sin embargo buscamos estar cerca de personas 


Sabes el dolor sirve para un propósito, nos puede dar información sobre nuestros valores y creencias, si solamente aprendemos a escucharlos, si aprendemos a escucharlos entenderemos el procesos de sanidad

Negación
Esto es típico responder ante un trauma. 
La negación es una capacidad que Dios nos dio para ayudarnos a comprar tiempo y asi poder encontrar la fuerza y recursos externos para sobrellevar el dolor. 
Nos evita caer en una realidad de golpe.

La negación llega a ser bueno porque no nos ahogamos con el golpe de la herida sino que nos ayuda a tragar lo sucedido poco a poco.

Ahora todo extremo es malo, si la negación continua puede impedir el proceso de sanación y atrapar a la persona en su dolor.

Ansiedad
La ansiedad es una preocupación intensa y excesiva, la ansiedad puede tener un propósito positivo, porque nos impulsa actuar. 
Es como un detector de humo nos advierte que esta sucediendo cosas que se escapan de nuestro control. 

La culpa
La culpa saludable nos mantiene en contacto con la realidad, nos recuerda lo que es destructivo para nosotros y para quienes nos rodean.
El propósito es acercarnos a nuestro Dios , es un sentimiento que puede ayudarnos a doblar rodillas y buscar el perdón de Dios.

La culpa toxica nos hace concentrarnos en nuestras heridas y no deja que sanemos, esta culpa empeora la herida 
Claramente esta la falsa culpa que lo que hace es que no te deja avanzar y te estanca en tu dolor

La vergüenza
La vergüenza nos dice que somos inaceptables y que nadie querrá saber de nosotras, nos sentimos inferiores.
La vergüenza nos puede decir: estoy dañada, sucia, incompetente, débil no valgo. 
Cuando nuestro padre nos dice que el nos sanara, nos limpia, el nos enseñara todo lo que necesitemos, en tu debilidad te hago fuerte, eres mi hija y valiosa.

La vergüenza insiste en que nuestras heridas ahora definen cada uno de los aspectos de nuestra identidad.

La vergüenza no destructiva nos ayuda a saber que algo anda mal, reconocemos que tenemos limitaciones, nos quita el orgullo, la gracia de Dios nos envuelve en amor y aceptación cuando aceptamos y depositamos esa vergüenza en sus manos.

¿Que Hacemos?

No importa tan doloroso que sea algo tenemos que enfrentarlo, no tener presente una herida no hará que desaparezca

Al no enfrentar nuestras heridas con coraje y determinación quizás estemos obligándolas a convertirse en algo mas negativo.

Pero si las enfrentamos podemos convertirlas en maestros.

La gracia y el perdón son la cura para nuestra culpa mas profunda

Primer paso perdónate 

Si has hecho daño tanto a ti, a otros esto necesitas hacer.
  • Arrepentimiento, admitir ante nosotros mismos y ante quienes se vieron afectados.
  • Remordimiento, sentir pena genuina y sincera por como herimos a Dios, a nosotros o a otros.
  • Restitución, actuar esforzándonos por hacer algo relacionado con lo que hicimos mal
  • Reparación, ir a quienes herimos y pedir perdón para luego realizar cambios 


Segundo paso Perdona 
  • A las personas que te hirió
  • A las personas que no te protegieron 
  • A las personas que profundizaron nuestras heridas
  • A las personas que no entendieron 
  • A las personas que no nos ayudaron a sanar
  • A las personas que nos juzgaron.

(Referencia: La mujer herida de Dr. Stephens y Pam Vredevelt)

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